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Basándose en una encuesta cualitativa acerca de la capacidad de actuación de los/as asalariados/as en Francia y Alemania, este artículo identifica dos modalidades de la confianza en la empresa: una confianza actuada que nunca es definitiva y necesita reforzarse constantemente con la acción, y una confianza latente que existe sea cual sea la situación. El artículo analiza su generación mediante la noción de mediación de terceros, un concepto con el que Georg Simmel designa una condición necesaria de la experiencia social. Utilizando el caso de una multinacional aeronáutica, se demuestra que en la confianza actuada intervienen dispositivos organizacionales y se forja en interacciones reales, mientras que la confianza latente descansa en configuraciones institucionales que son externas a la empresa. Al ser complementarias, dichas modalidades pueden coexistir en una misma organización, aunque su versión latente es cuasi inexistente en las grandes empresas francesas, puesto que predomina la confianza actuada. El enigma de esa improbabilidad, que se revela a raíz de la comparación francoalemana, es el objeto de nuestro artículo.