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El lanzamiento a finales de noviembre de 2022 de ChatGPT, un agente conversacional desarrollado por OpenAI, causó un gran revuelo y suscitó una serie de artículos y comentarios sobre el rendimiento y los avances de la inteligencia artificial (IA). Sin embargo, aunque los progresos en este campo son realmente impresionantes, persisten una serie de limitaciones, y la llegada de una IA totalmente autónoma y perfecta sigue siendo material de ciencia ficción. Bertrand Braunschweig, responsable de la coordinación científica del programa francés Confiance.ai, señala aquí cinco grandes «muros» contra los que podría chocar la IA si no les prestamos suficiente atención: la confianza en la IA, su consumo energético, la seguridad de los sistemas que gobierna, la interacción hombre-máquina y la inhumanidad de las máquinas. Al final del artículo, propone una serie de pistas de trabajo e investigación para responder a los retos que plantean estos cinco muros: mejora de las arquitecturas de red, combinación de modelos digitales y simbólicos, mayor interdisciplinariedad, etc. S.D.