9

Desde hace algunas décadas, la acción social se refiere a un nuevo lenguaje que se basa en un pensamiento único, predominantemente liberal. Un lenguaje que también ilustra nuevas formas de gestionar las instituciones y los actores profesionales. Esta elección de un modelo empresarial de la acción social persigue sobre todo un objetivo de ahorro del gasto público, que conserve, por parte del Estado, el control sobre la definición y la gestión de la cuestión social. Por lo tanto, el trabajador debe cumplir criterios de competencia y empleabilidad, mientras que la correspondencia entre la cualificación individual y la cualificación del puesto de trabajo ya no es fundamental. El sector social y médico-social está experimentando una desafección de las nuevas generaciones de estudiantes. De ahí la constatación de un debilitamiento de la autonomía profesional y de las profesiones en acción, que está relacionado con una lógica de ejecución de las tareas acorde con la exigencia de la gestión del tiempo y la racionalidad del acto profesional. La uberización del empleo, la inseguridad salarial y el trabajo temporal van en aumento.