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Cuando en 1969 se publicó la primera edición de Las ciencias de lo artificial, el libro incomodó inicialmente a libreros y documentalistas: ¿en qué ámbito disciplinar debía clasificarse? No solo atestiguaba la capacidad reflexiva de H. A. Simon, a sus 53 años, en la mayoría de los ámbitos de conocimiento reconocidos por las academias de ciencias, sino que también defendía la legitimidad gnoseológica y epistemológica de las «nuevas ciencias»: las ciencias de lo artificial, de la ingeniería y las ciencias del diseño, que se forman sobre «proyectos» y no sobre «objetos naturales».La aventura que ha supuesto este libro para nuestras culturas merece ser contada, ya que perdura cincuenta años después. Génesis, de 1945 a 1968: ilustrada por las elecciones a las Academias de las Artes y las Ciencias de 1959 y 1967. Segunda fase, la de un crecimiento asombroso de 1969 a 1981: tres capítulos más para la segunda edición, Premio Turing de la ACM (Informática) en 1975, Premio Nobel (Economía) en 1978. Tercera fase 1981-1996-2001, marcada por la publicación del manifiesto epistemológico Reason in Human Affairs (1983), que contribuirá a la renovación paradigmática de la epistemología compleja a través de las «nuevas ciencias», es decir, las ciencias de lo artificial, de la ingeniería, de los sistemas complejos y del diseño.