Brague, Rémi

Un salvador - 2020.


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Decir, como todo el mundo: «Hay un solo Dios» no es suficiente. Además, es necesario preguntar: «¿el único para qué?» El cristianismo responde: el único que salva. El Salvador se encarna en Cristo, cuya Trinidad esclarece el enigma. No diluye la unicidad de Dios, sino que permite pensar en la unidad que lo funda como caridad.